viernes, 2 de diciembre de 2011

Un encuentro inesperado

Esta tarde he ido al mercadona, sí al mercadona. Y diréis "verá tú el encuentro que ha tenido éste en el mercadona"... Pues de los mejores y más emotivos que he tenido este año.

Estábamos en la caja para pagar las compras y me fijé en una familia que había terminado. Los conocía perfectamente, y de pronto caí que eran los padres del pequeño que me enseñó lo que es el autismo. 

Nos metimos en el ascensor para bajar al parking y llegó el momento: su madre avisó al niño de que mi madre y yo estábamos allí, y nos saludó loco de contento, saltando y agitando sus manos. Se acercó a mí y le hablé. Él puso las manos sobre las mías, y sentí que me estaba saludando, que se acordaba de mí, que me expresaba su alegría por habernos encontrado. Fue algo maravilloso, sentir que te lo está diciendo todo tan solo con sus manos. 

Está altísimo, mejorando mucho y hecho un campeón. Lo he echado muchísimo de menos, acordándome de sus carreras por los pasillos, de sus portazos, de sus abrazos, de los juegos de pasar la pelota... pero sobre todo hoy, cansado y agotado como me encontraba, ha sido el único que ha podido levantarme. Lo quiero tanto...

Nos despedimos de él y su familia, y nos dirigimos al coche para descargar las bolsas. De camino a casa, mi padre pregunta:

- ¿Quién era ese niño?-mi madre le responde: 
- Este es el niño que nos tenía loquitas a mi compañera y a mí. Tiene autismo, pero nos tenía locas.

Locas de ternura y cariño hacia él. Un cariño que seguimos compartiendo y que seguiremos transmitiendo.  Un amor inigualable, una unión que sentimos hacia él, aunque esté lejos de nosotros.

A mi también me tienes loco. Gracias por este encuentro inolvidable.


6 comentarios:

  1. Que bonito...yo de vez en cuando llevo a Natalia a que vea a su profe de la guarderia y tambien se emociona mucho al verla...nuestros hijos dejan huella...una huella bonita,un recuerdo unico.Un beso!

    ResponderEliminar
  2. Que lindo jesus. Desde luego como nos marcan estos pekes.

    Un besito

    ResponderEliminar
  3. ains Jesús que trabajo tan bonito... la de niños que pasan por tus manos....

    ResponderEliminar
  4. ¡Qué bonito! Es cierto que a veces nos topamos con personitas que nos marcan mucho y que no olvidamos nunca. Tú como maestro te encontrarás con muchos niños así a lo largo de tu vida, y debe ser algo maravilloso!

    ResponderEliminar
  5. Que bonito Jesus, da gusto leer de profes asi.
    besos.

    ResponderEliminar
  6. Hola Jesús, me ha gustado mucho esta entrada y en la que relatabas cómo conociste al niño. Un abrazo. Fernando.

    ResponderEliminar

Déjame tu opinión, lo que piensas y lo que sientes, lo que quieras. Sé cauto con tus palabras, a todo el mundo le gusta que le hablen bien.