miércoles, 14 de septiembre de 2011

El genio, Pulpi y el color Rojo

Muchos de los pequeños que están en nuestra clase ya se sienten como en casa, pero hay algunos que siguen completando su adaptación poco a poco y con resultados muy notables. No obstante, a veces, les entra un pequeño berrenchín o genio, como el caso de hoy, o no tienen ganas de trabajar, o incluso pegan o muerden a otros compañeros. Es una manera de expresar lo que sienten, de soltar tensiones, y a los maestr@s, cuando se repiten una y otra vez, nos sacan de nuestras casillas (y a más de un padre seguro que también). Tengo que reconocer que la solución más rápida que se nos ocurre es castigar, pero no siempre es la mejor alternativa. Debemos enseñarles que hay maneras más bonitas de expresarse, como dar un beso o un abrazo, y hablar con ellos cada vez que les salga un genio (y no, no hablamos del genio de la lámpara precisamente).

A la par de su adaptación, comenzamos a hacer pequeños trabajos. El lunes coloreamos a Pulpi, nuestro amigo el pulpo que vive debajo del mar, y decoramos la cristalera de la clase para que todos lo vieran.


Hoy, hemos conocido al color Rojo y les he contado su cuento. En él, nuestro amigo sale a pasear y pinta objetos de su color, como una manzana, un globo, unas cerezas...
He acompañado el cuento con una cera roja, pues el personaje tenía esa forma, y les ha encantado verla. Les entusiasmó tanto que algunos se levantaban a coger la cera roja mientras que los demás sonreían. 

También conté un cuento sobre el tamaño grande-pequeño, donde salían muchos animales: una hormiguita, una mariquita, una vaca grandota y un elefantón, entre otros. El elefante y su gran trompa fue su favorito. 

Los cuentos son estupendos para estas edades (y más mayores) porque se tranquilizan, dejan volar su imaginación y les fascina ser partícipes de la historia. 

De ahora en adelante, publicaré información sobre alguno de los cuentos que hemos leído y que más han gustado.


4 comentarios:

  1. Te agradezco que me hables de esos cuentos. Muchas veces no sé como entretener a mi hijo y lo de la cera roja me ha parecido una idea buenísima. Hoy vamos a darnos una vuelta por toda la casa para indagar por donde se ha ido de paseo el color rojo. Mi chico está ya adaptadísimo a la guarde. Tanto que esta mañana se ha ido corriendo a jugar con sus amiguitos sin decirme ni adiós (Qué dolor de corazón. Nunca estoy contenta). Me alegro de que esté contento con su clase.

    ResponderEliminar
  2. Pues si yo a veces no sé como domar a cuatro, no quiero ni pensar lo que estaréis pasando vosotros con 10-15-20 niños despistados en clase.
    Ánimo con vuestra adaptación (del otro lado) a la vuelta al cole!!!

    ResponderEliminar
  3. Madre desesperada, la verdad es que ya tengo el primer cuento que les encanta, a ver si lo encuentro por la red y os informo.

    Laura, pues tenemos 22 en una clase y 22 en otra, hay diferencia de edad en las dos, por lo que en una son más grandes y se encuentran mejor, y en la que yo estoy la mayor parte de la mañana son más pequeños y les cuesta más. Es complicado, a veces hemos perdido los nervios, pero nos gusta educar, al igual que a ti te apasionan tus 4 churumbeles!! Eso es lo grande que tiene esta labor!! Gracias

    ResponderEliminar
  4. mi pequeñin tambien va a la clase de dos años el a hecho ahora los dos añitos y medio y tambien estan dando el jojo(rojo) y el illo(amarillo) como dice el

    ResponderEliminar

Déjame tu opinión, lo que piensas y lo que sientes, lo que quieras. Sé cauto con tus palabras, a todo el mundo le gusta que le hablen bien.