jueves, 1 de septiembre de 2011

El sonido de la lluvia al caer



A todos se nos traba la lengua cuando volvemos a hablar del 1 de septiembre. Más que nada porque pensamos que 1 de septiembre = vuelta al trabajo = HORROOOR!! y se nos pone una cara de "no me hables" o de "me lo tomo a bien, o por lo menos hago el intento". 

A mí no me ha parecido tan grave, sobretodo cuando ansiaba tanto que llegara este momento: trabajar por primera vez en una guardería.

Como todos los primeros días de un curso escolar, hemos consolado llantos, hemos jugado con todo tipo de cosas, hemos dado de comer, hemos pintado, hemos cambiado pañales... Pero lo mejor han sido ellos: Miguel y Carlota investigando los cajones de la clase, las piernas de Malva encima de la mesa, el "vale" de Giulia cuando le dije que iba a llamar a su madre, Fernando y Ale que iban a la puerta cada vez que veían una, los fortísimos abrazos de José Luis, la voz de Laura diciendo "pato" y el silencio de todos para escuchar el sonido de la lluvia al caer. 

Saber que tengo el papel de maestro auxiliar para las clases de 2 años me hace pensar que no voy a parar ni un minuto, pero creo que, sólo con vivirlo, merece la pena el reto.

1 comentario:

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