martes, 27 de septiembre de 2011

Hora de comer!!!

Después de haber leído algunos post sobre él y de conseguir leer algunos fragmentos de su libro "Bésame mucho", reconozco que las cosas que dice y los argumentos que defiende son realmente convincentes. 
Pero el hecho de que haya puesto la portada de su libro "Mi niño no me come" no es para hablar de él precisamente, es para que me ayude de ahora en adelante. 
Resulta que uno de mis puntos débiles es dar de comer a los peques, sobre todo a los que no quieren, y la verdad es que intento por todos los medios intentar que coma algunas cucharadas, pero nada, que no hay manera. 
Es una situación complicada, que a veces se soluciona con el típico "pues si no comes, no hay esto, o no hay lo otro", o también se le obliga a comer o se le quita el plato a las primeras de cambio (porque no le gusta lo que hay). Yo no estoy de acuerdo con estos métodos, y no los llevo a cabo, ya que no me gusta que un niño coma forzado. Para el niño, el momento de comer tiene que ser un disfrute, y tiene que comer de todo (aunque no le guste, un poco). Por eso, pienso que obligándole o quitándole la comida que no gusta, no ayuda ni por una parte ni por otra. 
A nosotros nos suele pasar con varios pequeños, y es una situación en la que pierdo la paciencia muy rápido, pero de ahora en adelante intento buscar alguna alternativa que me permita "jugar" con el niño en la mesa. Son historias, conversaciones inventadas que hacen que el niño se sienta a gusto. Son cuentos de siempre adaptados a la hora de comer, o personajes que han visto en clase y te inventas una historia con ellos. 
Realmente funcionan, pero seguimos teniendo la costumbre de continuar por la senda rápida de la que hablaba antes. Dejemos que la creatividad florezca en estas situaciones, y enseñemos a los peques que comer es divertido y bueno para ellos.
Prometo leer y releer a Carlos, a ver que consejos me da. Y si vosotros tenéis alguna propuesta que os sirve en la mesa, me encantaría escucharla.

2 comentarios:

  1. Tengo la suerte de que el mío suele comer bien y probarlo todo, aunque siempre hay ocasiones en las que cierra su boquita y dice "No, no, no, no, no". La verdad es que yo suelo dejarle el plato delante y simplemente le digo "¿No te gusta? No pasa nada cariño. Mamá va un momentito a hacer una cosa en la cocina y cuando vuelva se lo come" A mi regreso suelo encontrarlo masticando. No se lo come todo, pero es lo que dices, al menos lo prueba. El resto me lo tengo que comer porque lo que digo lo cumplo.

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  2. Los mios son malos comedores,pero yo a estas alturas he entendido que la comida es otro hábito más de la vida,igual que el sueño,la higiene......Son situaciones que no hay que obligar a los niños ya que son necesidades fisiológicas.Con mi mayor solía hacer eso que dices y había días que funcionaba y días que no,días que una tiene tiempo y paciencia y días que no.
    A día de hoy,que tienen hambre????pues come,hay días que comen más,otros menos y otros que nada de nada,pero te aseguro que no se mueren de hambre,cuando tienen hambre arrasan,claro que a mi me encantaría que fuera siempre,que les voy a hacer,no salen a mi y no les voy a obligar.Y como estan sano,aunque siempre por debajo de peso(pero es que ellos son asi,cuando les cambie el metabolismo que no me vengan con dietas!!!!).
    Claro que en tu caso, a lo mejor tu obligación es insistir,ni idea cómo va el tema en los comedores porque los mios comen en casa.

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